Un pescador pescó algo pero no podía alegrarse mucho de su presa. ¡Este ataque fue inesperado!
Un rasgo común de todos los pescadores es la paciencia. Pasan horas y horas en la orilla del río o del lago esperando este momento maravilloso cuando un pez muerde el anzuelo. Da igual la técnica y las herramientas disponibles, todos los pescadores se sienten satisfechos por pescar algo. Pero... ¿qué pasa cuando de repente se les roba su presa tan esperada? El hombre de la grabación ya sabe que se siente entonces. Fue atacado por un listo y rápido... gato.