Sin ayuda de un brasileño, este perrito ya estaría muerto. ¡ Qué gesto tan bello!
Antes de llevarlo al veterinario, él solo le vendó. Hace tiempo hizo un curso básico de primeros auxilios pues ya sabía como actuar.
Después el veterinario ya se ocupó de Francisco.
Por desgracia, sus heridas eran tan graves como parecían serlo. El perro tenía que estar bajo observación.