Después de un tiempo la buena gente iba a rescatarlo, pero el perro no quería moverse de su sitio. Por eso le hicieron algo como una cabaña pequeña de los paraguas para protegerlo de la lluvia y le dejaron la comida.
Cuando hacía mucho sol, el perro también se tumbaba bajo los paraguas, pero no se alejaba...
Parece raro, pero el perro miraba la calle incluso comiendo...