Lo que vio le sorprendió muchísimo. Sin él, esta historia acabaría mal...
El hombre de la grabación, Andrew, fue un testigo de una situación poco común. Cerca de su garaje se agitaba un pequeño zorro muy asustado con una lata en su cabeza. El animalito iba a comer los las sobras de la lata con la comida para los perros, pero por desgracia después no podía sacar la cabeza de la trampa de metal. Sin Andrew esta aventura hubiera podido acabar mal.
Es más, el hombre supone que estas situaciones pasan muy a menudo ya que en su jardín encuentra muchas latas. Cerca están los contenedores, pues no es difícil entender lo que pasa: los animales salvajes después de encontrar algo para comer se alejan a un sitio más tranquilo para comer. Es decir, a su jardín. Esta vez sin ayuda de parte de un humano el zorro no hubiera podido liberarse. Por eso os pedimos: hay que cuidar bien vuestra basura para que los animales salvajes no se hagan daño. Los animales os lo agradecerán. Bueno, sólo mirad la reacción del zorro.
Comparte este video con los demás. ¡Todos deberían ver lo peligroso que es nuestro descuido para los animales!