Rescataron a un burro que estaba ahogándose. ¡Su reacción fue genial!
Por si acaso, el veterinario le examinó y le dio un antibiótico contra la pulmonía.
La mujer le llamó “Mike” pero...
El burro ya tiene su propio nombre y unos buenos dueños. El caso es que el burro huyó del establo cuando el viento abrió la puerta. A ver si esta experiencia desagradable causa que el burro deje de escaparse.