¡Lo que este hombre hizo con las tortugas fue increíble! Tenéis que verlo.
En muchos países se come las tortugas marinas, por ejemplo en Nueva Guinea. Es dónde Arron Culling y su compañero de trabajo, Mark, se fueron a un mercadillo. Sin embargo, no iban por la comida.
Culling compró dos tortugas marinas por 50 euros. Luego viajaron con Mark a la orilla del mar y... devolvieron la libertad a estas criaturas.
Los hombres salvaron más tortugas. En total, compraron diez animales en el mercadillo.
En el mundo hay siete géneros de estos animales. Todos se hallan en peligro de extinción. A mucha gente le gusta mucho su sabor...