Una mujer mayor parecía perdida. Todo el tiempo repetía que su hija acaba de dar a luz... Nadie la entendía, pero finalmente reaccionó un policía.
En septiembre en Corea del Sur un policía que es un novato en su profesión, Pak, fue llamado para ver a una mujer mayor que se comportaba de manera muy rara. ¡Pak no sospechaba que sería testigo de una situación muy emocionante!
Pak se fue a la calle donde por cuál andaba una mujer mayor. Tenía dos bultos que parecían pesar bastante. El policía le preguntó sobre su nombre, edad... Quería saber algo sobre ella, pero la mujer sólo repetía esta frase: “Mi hija acaba de dar a luz en el hospital, debo irme.”
El policía rápidamente se dio cuenta de una cosa. La mujer no estaba loca. Sufría la enfermedad de Alzheimer. A Pak le costaba comunicarse con ella pues le hizo una foto con su móvil y preguntó por ella a los vecinos. Pak viendo las pantuflas de la mujer sabía donde preguntar por ella. Tenía que vivir cerca. ¡Tuvo razón!
Unas horas más tarde la identificó. Su hija de verdad dio a luz y estaba en un hospital así que el hombre acercó a la mujer en su coche.