¡Ya podéis echar a la basura vuestro raspador! Gracias a este truco por la mañana no tendréis problema.
A nadie le gusta preocuparse por la mañana por los cristales escarchados. Hay que levantarse más temprano para ocuparse del coche, temblando de frío... ¡Y hay una manera eficaz para no empezar las mañanas invernales tan mal! Seguid leyendo.
En una botella de un litro con pulverizador hay que mezclar 600 ml de un alcohol puro, 200 ml de agua y unas gotas de un detergente.
Rociamos los cristales, esperamos un ratito, pasamos un trapo por los cristales y... ¡listo! Encima, el detergente quita la suciedad. Hay que hacerse la vida más sencilla, ¿verdad?