Nadie quería adoptar a este cachorro, pero cuando ella lo vio... ¡Fue el destino!
Cuando Jordan Trent tenía 15 años se hizo daño en un ojo mientras trabajaba en su jardín. Lo que se suponía un trabajo fácil, para él tuvo un final muy triste. Un trozo de metal se metió en su ojo. Los médicos hicieron lo que pudieron, pero fue imposible salvar el ojo herido. Jordan tenía que aprender a ver con sólo un ojo. Con el tiempo se dio cuenta que su situación le incómoda más a la gente que a él mismo, pues empezó a bromear de su minusvalía.
Jordan tiene una esposa y dos hijos. Un día todos se fueron a un centro comercial de compras. Cuando los niños vieron a unos cachorros en venta se acercaron ahí. Sin embargo, sus padres no planearon comprar un perro... Cuando la familia vio a un cachorro sin un ojo ya sabían que los planes cambiaron de repente: él cachorro tuvo que volver con ellos a casa.
Nadie quería adoptar a este cachorro. Seguro que se sentía solo y más cuando todos sus hermanos se fueron uno tras otro con sus nuevas familias...
Por suerte cuando la hija de Jordan vio a este cachorro se puso a llorar...
Dijo que él es igualito que su padre. Tampoco ve por un ojo. ¡Fue el destino!