Una niña de 9 años estaba sentada tranquilamente hasta que empezó el concierto. ¡Un rato después dejó a todos boquiabiertos!
Alisa Sadikova sin duda es una de los niños prodigiosos. La rusa empezó a tocar el arpa cuando tenía cinco años. ¡Su profesora, Olga Shevelevich, cuando la escuchó tocando la primera vez, estuvo sorprendida! Alisa entonces por la primera vez sujetó un arpa y ya pudo copiar los movimientos de su maestra. Olga no tiene dudas: “ Sólo un genio puede tocar como ella.” ¿Estáis de acuerdo?