Los perros nunca mueren. Ellos duermen en tu corazón. ¡Todos los amantes de los animales deberían leerlo!
La pérdida de su perro le duele mucho a cualquier dueño. Los perros son los amigos más fieles que aman de una manera incondicional. Esperamos que estas palabras sabias ayuden a todos. Si te ha inspirado este artículo, pásalo a los demás.
Estas palabras fueron escritas por Ernesto Montague y publicadas en DogHeirs. Ernesto escribió este texto conmovedor después de perder a su querido pitbul Bolo. El perro blanco y negro adoraba pasear hasta el fin de su vida.
Incluso cuando cada cinco metros tenía que parar se veía en sus ojos ganas de seguir andando.
“Algunos de vosotros, especialmente los que hace poco perdisteis a vuestro perro por la muerte, no lo entienden del todo. Bueno, no necesito explicarlo como tal, pero como yo tampoco soy eterno tengo que deciros algo.
Los perros nunca mueren. Es que ellos no saben cómo hacerlo. Están cada vez más cansados y envejecen, les duelen los huesos. Por supuesto, no mueren. Si estuvieran muriéndose, no les apetecería pasear. ¡Y quieren salir mucho incluso cuando sus viejos huesos les dicen que no es una buena idea! Ellos siempre quieren darse una vuelta incluso cuando un paso más significa que sus tendones viejos no podrán aguantar el peso de sus cuerpos. Ellos seguirán andando.
No es que a ellos no les gusta tu companía. ¡Al revés! Andar contigo es todo para ellos. La sinfonía de los olores que les rodea es su mundo. Una caca gatuna, el olor de otro perro, restos de un pájaro descomponiéndose, y tú. Es lo que ellos llaman un mundo ideal y en el mundo ideal no hay sitio para la muerte.
Sin embargo los perros cada vez tienen más sueño. Y de eso se trata. No lo enseñan en las universidades donde más bien se aprende qué es un quark, gluón y la economía de Keynes. Ahí la gente sabe tantas cosas que se le olvida que los perros no mueren. Da mucha pena. Los perros tienen tantas cualidades y la gente sólo sabe hablar sin parar.
Cuando piensas que tu perro murió, él sólo se quedó dormido en tu corazón. Sigue meneando la cola y es por eso que tanto te duele el corazón y todo el tiempo lloras. ¡Quién no lloraría teniendo en su corazón a un perro feliz que menea la cola! Ay, duele... Ellos menean cuando se despiertan ahí. Es cuando dicen: “¡Gracias! Gracias por un lugar caluroso donde dormir, además tan cerca de tu corazón, no hay un lugar mejor ”.
Al principio se despiertan cada rato y por eso lloras tanto. Su cola se mueve de un lado a otro. Sin embargo, con el tiempo duermen más. (Tienes que recordar que un momento canino es diferente que el humano. Vas a darte una vuelta con tu perro y para él es todo el día lleno de aventuras durante una sóla hora. Luego vuelves a casa con él y hasta que no salgáis de nuevo, según él pasa una semana o por lo menos un par de días. Pues no sorprende por qué quieren salir tanto).
De todas maneras, como ya he dicho, ellos se quedan dormidos en tu corazón y luego se despiertan meneando la cola. Después de unos años caninos ya duermen un poco más, pues tú también puedes. Fueron perros muy buenos toda su vida y todos lo saben. Ser un buen perro todo el tiempo cansa mucho y más cuando uno ya es viejo y le duelen los huesos y a pesar de eso uno quiere salir fuera aunque se choca contra sus propias patas y termina con el hocico en el suelo. Quiere salir incluso cuando llueve y cuando realmente no le apetece salir, pero los perros buenos se menean fuera. Hay que entenderlo, después de algo así el perro necesitará dormir más y descansar en tu corazón. Dormirá más y más.
¡No dejes engañarte! Ellos no están muertos. No hay algo así en el caso de los perros. Ellos duermen en tu corazón y se despiertan cuando menos lo esperas. Ellos son así.
Me da mucha pena la gente que no tiene a un perro durmiendo en su corazón. Pierden mucho... Y ahora lo siento, pero voy a llorar."
Esperamos que estas palabras sabias ayuden a todos. . Si te ha inspirado este artículo, pásalo a los demás.