Parecen unos perros normales, pero cuando se levantan... ¡Increíble!
Joshua Fisher y su esposa Bee soñaban con tener una familia numerosa. Tienen tres hijos. Tanto Joshua, como su esposa, se críaron en casa llena de mascotas y por eso querían que sus niños también se hicieron amigos de los perros. No sospechaban que comprar dos perros cambiaría su vida de una manera tan INMENSA...
La familia de los Fisher vive en Long Beach en Estados Unidos. Lenox, Cruz y Tegan soñaban con tener un perro así que pronto a su casa llegaron unos nuevos miembros, dos terranovas.
Se llaman Ralphie y Boss. De todas maneras, no son representantes típicos de su raza...
¡Estos dos son grandísimos! Dicen que los terranovas pueden pesar hasta 115 kilógramos, pero cuesta ver uno tan grande en la calle. Y la familia de los Fisher tuvo mucha suerte: compraron dos gigantes del mismo dueño.
