Un conductor vio a una niña de 5 años sangrando. Cuando se acercó, su estómago dio un vuelco!
En un día así nadie esperaría un accidente: hacía sol, la visibilidad era buenísima, pero por desgracia lo que falló fue un hombre. Angela Shymanski conducía su coche con dos niños dentro desde una ciudad canadiense, Prince George. Angela es una instructora de natación y la madre de Lexi de 5 años y del pequeño Peter. La mujer estaba tan cansada que... se durmió detrás del volante. ¡Lo que pasó más tarde fue trágico!
El coche se deslizó del acantilado desde 12 metros de altura y chocó contra un árbol. Angela se desmayó y su cabeza chocó contra el volante con fuerza. Por suerte a Lexi no le pasó nada grave, sólo tenía varias heridas que sangraban. Su hermanito de tres meses lloraba. El coche se paró en una roca escarpada imposible de verla desde la carretera.
¡Fue cuando Lexi hizo algo increíble! Sabía que tenía que ayudar a su familia, pues salió del coche y... ¡empezó a subir el acantilado!
No sabemos de dónde una niña de 5 años sacó tanta fuerza y valor. Según los psicólogos es bastante frecuente: un salto de adrenalina y la necesidad de ayudar a alguien importante para ella causaron que Lexi simplemente supiera lo que debía hacer. Cuando salió a la carretera, el conductor no creía en sus propios ojos.