Un hombre llevó a su hija de 9 años a su casa después de la operación. Un año más tarde sus padres le abrazan de alegría.
Zubaida con su padre viajaron a Los Ángeles. Según el doctor y sus ayudantes el tratamiento de la niña tardaría 3 años y contaría con varias operaciones dolorosas.
El padre de Zubaida tuvo que volver a casa, pero el doctor Grossman y su mujer le prometieron ocuparse de su hija. Ellos mismos no tienen hijos. Después de su primera operación, la chiquilla se quedó en su casa. Durante la operación tomaron la piel de su espalda para luego usarla en su cara.
¡Así Zubaida cambió durante un año! Y... ¡ya pudo volver a casa!