Quema en casa unas hojas de laurel y ya 10 minutos más tarde verás que pasará.
Respirarlo limpia las vías respiratorias, baja la tensión, ayuda a controlar el nivel de azúcar en la sangre y nos hace sentir mejor ya que reduce el estres.
Lo gracioso es que a casi nadie le gusta el sabor de las hojas de laurel y por eso si ya mordemos una hoja sin querer, ponemos una cara rara... ¡Sin embargo todos deberían olerlo! :)
¡Pero ojo! Las hojas tienen que estar bien secas para quemarlas! Hay que colocarlas en un bol fuera del riesgo de incendiar algo.