Cuando los encuentran en la basura, esta perrita y su cachorro son sólo piel y huesos.
Los voluntarios les llevaron a una clínica veterinaria. Los perros estaban demasiado débiles para andar.
En la clínica la gente se dio cuenta del miedo de estos dos... Les daba miedo tanto la gente, como otros animales. Por suerte, ya todo cambió...
Los perros primero aceptaron a su veterinario y luego poco a poco aceptaron a otra gente y animales. ¡Y sólo míradlos ahora!