Un niño de cuatro años cayó a la fosa de un gorila. Lo que pasó luego dividió a la gente.
Hace poco en Cincinnati (Estados Unidos) ocurrió un accidente terrible. Una madre se fue a un zoo con su hijo. Supuestamente por falta de atención el niño cayó a la fosa del gorila. El niño no se fracturó nada (¡fue un milagro!), pero luego la situación se volvió peligrosa. Pero a ver si así fue de verdad...
El gorila, alarmado por los gritos de la muchedumbre, se acercó al niño. Según muchos testigos oculares el gorila no parecía agresivo, más bien el niño despertó su curiosidad. Sin embargo, este animal pesaba 200 kilógramos así que ya sólo por eso fue una amenaza para el chiquillo. El director del zoo tuvo que actuar inmediatamente. No se podía usar un dardo tranquilizador ya que habría tardado demasiado en hacer efecto y la ira del gorila sería peligrosa para el niño. Por eso tuvieron que matar a Harambe. Todos dicen que fue una pena, pero no pudieron arriesgar la vida del pequeño.
Los que defienden a los animales y los testigos oculares no dijeron nada sobre la agresión de parte de Harimbe. En su opinión, matar a este animal fue una decisión equivocada. ¡A ver qué opináis vosotros después de ver este video!