En el escenario apareció un participante lleno de tatuajes. ¡Lo que pasó cuando empezó a cantar fue INCREÍBLE!

Dicen que no se puede juzgar a un libro por su cubierta. Es muy cierto en el caso de un participante de "The Voice" australiano, Matthew Garwood.

¿Qué se podría esperar de un chico con tantos tatuajes? Supuestamente una actuación de punk o hip-hop. ¡Esta vez os espera una sorpresa!

Cuando empezó su actuación, los que le estaban viendo no creían a sus propios ojos. Su voz y esta canción no tienen mucho que ver con los tópicos sobre la gente con tatuajes.

¡Muy pronto uno de los miembros del jurado quiso ver a este concursante! El primer fue Ricky Martin. ¡Mirad lo que pasó más tarde!

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