Una niña de 4 años pasó en el bosque 11 días. ¡Cuando veáis quién estuvo a su lado, os conmoveréis!
Todos tuvieron mal presentimiento, pero el perro se fue corriendo hacia el bosque. ¡Gracias a seguirlo encontraron a Karina! Estaba hambrienta, deshidratada y asustada, pero seguía viva.
Karina sobrevivió gracias a comer bayas, beber agua de un río y, por supuesto, gracias a su fiel perro. Le protegía contra animales silvestres. Además, le daba calor a la pequeña por las noches.
En el pueblo todos apreciaron mucho el valor, sacrificio e inteligencia de este perro y por eso le erigieron una estatua. Se lo mereció, ¿verdad?