Una pareja quiso ver una casa que estaba en venta. ¡No esperaron pasar por esto!
Vender una casa no es nada fácil y lo saben bien todos los agentes inmobiliarios. Hay muchísimas ofertas y los clientes tienen sus caprichos que es normal. Comprar una casa es una inversión para toda la vida. Por eso las agencias inmobiliarias tienen que esforzarse mucho para atraer a los clientes... Lo que tiene éxito ahora es... construir un roller-coaster.
Imaginad esto: entráis en un carro de una montaña rusa y se vais en un viaje narrado de la casa. Os informan por un megáfono dónde estáis y sobre todos los detalles interesantes. Suena bien, ¿verdad? ¡Mirad las caras de los clientes!
¿Alguien quiere comprar una casa? ¡Seguro que os gustaría este paseo!