¿No permites que tu perro duerma contigo? Quizás después de leer este artículo ya siempre quieras tenerlo a tu lado!
Todos los dueños, incluso los más cariñosos, fijan límites a su mascota. Una de las reglas más frecuentes es no permitir saltar a la cama (los perros infrigen esta regla siempre cuando se queden solos en casa). Hay muchas razones por cuáles no queremos la compañía de nuestro perro en la cama, pero también hay siete razones muy buenas para compartir nuestro dormitorio con nuestra mascota de vez en cuando.
1. La sensación de lo más acogedor
¿Tenéis un mal día? ¡Pues a llevar a vuestro perro a la cama! Nada mejora el ánimo tanto como el calor agradable y la respiración tranquila del perro durmiendo a nuestro lado.
2. Nada de preocupaciones
Los científicos lo confirman: la presencia de un perro a nuestro lado reduce el estrés, nos da la sensación de estar seguros y protegidos y, además, nos hace sentir calmados.
3. La relajación
Los perros son unos terapeutas muy buenos y por eso a los que sufren de varios tipos de depresiones y otros trastornos emocionales se les recomienda abrazar a su perro.