Estaba pasando en su coche al lado de un vagabundo. Cuando vio lo que tenía escrito en un cartón, paró el vehículo.
Wilma Price de Huntsville (Texas) iba a volver de las compras cuando vio a un vagabundo en el arcén. Wilma nunca daba dinero a los vagabundos diciendo que si ella puede trabajar, ellos también pueden. Sin embargo este sin techo era diferente... No quería dinero para sí mismo. La mujer quiso ayudarle.
Wilma vio a Patrick, como se llama este vagabundo. El hombre sujetaba en sus manos un cartón donde ponía: "El perro en la perrera. Necesito ayuda".
La mujer paró su coche para preguntar que había pasado. Patrick lo contó todo: le arrestaron por dos días por entrar en un terreno privado y mientras tanto su perro se encontró en una perrera. Necesitaba 120 dólares para redimirlo.
Wilma ya tenía sólo 8 dólares en su cartera, además no quería confiar ciegamente en sus palabras. Volvió a su casa y llamó a la perrera. Un trabajador de la perrera confirmó toda la historia. Añadió que el perro estaba bien alimentado y limpio. Parecía que Patrick le cuidaba más que a sí mismo. Wilma ya no quería pensarlo más. Cogió el dinero y se fue a buscar al vagabundo.
Patrick tuvo que pagar 120 dólares por la estancia de su perro en la perrera y también por la vacuna que le dieron. "Fred Frederick" se volvió loco al ver a su dueño.
Viéndolos Wilma ya sabía que hizo lo correcto. Patrick y su dueño no tienen donde vivir, pero son los mejores amigos y necesitaban ayuda. Y les ayudaron :)