Sin ayuda de parte de estos dos hombres, una recién nacida no sobreviviría. ¡Lo que hicieron sus padres no cabe en la cabeza!
En Tayikistán sucedió una situación que indignó a todo el mundo. Un hombre iba a usar un baño público cuando oyó un llanto... dentro del inodoro. Algo aturdido, por si acaso llamó a su amigo y los dos intentaron oír algo más. ¡Gracias a ello salvaron a una recién nacida!
La pequeña estaba envuelta en una bolsa. Sus padres iban a matarla... Por suerte la ayuda llegó en un buen momento. La chiquilla ya tiene otra familia y sólo esperamos que no tenga trauma por este hecho tan macabro.