Cuando esta embarazada se encontró en el hospital, los médicos tenían miedo de tocarla.
Los Kobletskaya ya tienen un nuevo piso, mucho más grande que el anterior. Además, a menudo les dan varias propuestas de hacer publicidades y Oksana tiene cuentas en Internet gracias a cuales gana más dinero.
Sin duda, tener quintillizos es un reto, pero parece que Oksana y Sergey se defienden bien.
Su hija mayor les ayuda mucho y se siente responsable por sus hermanos y hermanas.