¡No hace falta hornear este pastel! Después de unos minutos de preparación es suficiente dejarlo en el congelador. ¡Qué rico!
Ahora toca cortar la parte superior de las botellas de plástico. Cortamos lo que queda otra vez.
Ponemos una parte dentro de otra creando un molde cuál llenamos con la mitad de nuestra crema.
Ponemos unas frambuesas sobre crema y luego añadimos dos o tres bizcochos mojados en café.