Casi muere durante su primer parto. ¡24 horas más tarde su esposo se despide de ella y ocurre un milagro!
Melanie necesita un trasplante de pulmones. Bueno, por lo menos lo necesitaba ya que una semana después los médicos se quedaron estupefactos: esta mujer, después de sobrevivir la muerte clínica, empezó a respirar sin ayuda de los aparatos.
El caso de Melanie es un milagro sin explicación.
¡La esperanza nunca muere! Vale la pena pasarlo a los demás.