La dueña de este perro le pidió que se acercara junto con un gato. ¿El efecto? ¡No podemos parar de reír!
Este perrito todos los días cuida de su mejor amigo, un gato. A veces le ayuda en volver a casa de manera inusual: ¡en su propia espalda! Lo más gracioso es que el perro es más pequeño que el gato. Tenéis que verlo:
¡A compartir este video!