Una pareja iba a huir de un animal salvaje, pero fue cuando vieron algo muy raro en su cabeza y empezaron a grabar.
Dean Hornberger y Samantha Eigenbrod sólo iban a pasear un poco, pero su paseo se convirtió en misión de rescate. La pareja que vive en Pensilvania (Estados Unidos) vio... a un oso negro. En una situación normal hay que alejarse de osos, pero esta vez todo fue distinto. Un osito muy curioso metió su cabeza dentro de un balde de agua y se quedó atrapado.
Sin ayuda de esta gente, el oso acabaría mal... ¡Un gran aplauso para estas personas por querer ayudar arriesgando su propia salud!
Lo hicieron muy bien, ¿verdad? ¡Vale la pena pasarlo a los demás!