Los doctores tuvieron que partir los huesos de su pequeña hija. ¡6 años después, nadie imaginaba que la niña luciera así!
Zoe ya tuvo varias operaciones. Su madre dice con lágrimas en los ojos que la niña ya se da cuenta si se le ha roto un hueso o no. La verdad es que no puede andar ya que sus huesos no aguantan tanto peso, pero usa una silla de ruedas para moverse. Sus padres siguen esperando un milagro...