¡Lo que su hijastra le hizo poco antes de su boda, fue horrible!
No sabemos si esta historia es verdadera o no, pero algo nos dice que en nuestros tiempos es muy posible... Las parejas rompen antes de conocerse bien, los divorcios son lo más normal y los niños pronto conocen a un nuevo amigo de su padre o de su madre. Eso no significa que su nuevo “padre” es una mala persona. El protagonista de esta historia les amaba sinceramente tanto a su pareja, como a su hija. Además, la cría como si fuera su hija biológica. El padre de la chica desapareció cuando le tocó pagar la pensión de alimentos...
Por eso el protagonista de nuestra historia se ocupó tanto de criar, como de mantener a la chica. El hombre cuenta que:
“ Mi hijastra se va a casar pronto. Ella y mi mujer llevan seis meses hablando sobre la boda y preparándolo todo. Mi hija, como la llamo, hace poco terminó sus estudios y a pesar de elegir una universidad pública, pagué mucho para que pudiera estudiar. Le compré un coche ya que para ella era más cómodo ir a la universidad en su propio vehículo. Vivía con nosotros para ahorrar dinero: ella no trabajaba, solo estudiaba. Poco antes de su boda en nuestra vida apareció su padre biológico.
“Mi hija y su padre biológico empezaron a quedar regularmente y ella se veía tan feliz diciendo que de nuevo tenía un padre... Bueno, eso me dolió. Su padre no había pagado por un solo día de su educación, no estaba a su lado en los momentos más importantes, nunca le ayudaba cuando estaba enferma o necesitaba apoyo, pero ella enseguida me apartó cuando él volvió, pero bueno, voy al grano...
La boda estaba prevista para 250 invitados y yo pidé que invitasen veinte de mis amigos. Al fin y al cabo, era yo quién iba a pagar por la boda, pues tenía derecho de invitar a mi gente. Mi pareja y su hija me dijeron que no había problema... Cuando quedé con uno de mis amigos y pregunté sobre la boda, se sorprendió. No sabía nada sobre la boda de mi hija. Cuando furioso discutí con mi familia, me dijeron que por falta de espacio (la lista incluía solo a 250 invitados) no les mandaron las invitaciones, pero habían invitados que dijesen que no podían venir así que ya quizás... ¡Como si mis amigos fueran la gente de otra categoría! Parece que lo mismo pensaban sobre mí y lo mostraron durante una cena oficial con el novio de mi hija, los padres del chico y, lo que más me sorprendió, con el padre biológico de ella.
Durante la cena la chica que era para mi como mi propia hija, dijo que se alegraba mucho por poder ir al altar acompañada por su padre biológico. A todos les gustó la idea y yo noté un nudo en la garganta. No sabía que elegir: llorar o reírme como un loco. No aguanté más y les pedí a todos que me prestaran la atención y dije:
Me gustaría hacer un brindis. Noté como mi pareja y su hija intercambiaron miradas preocupadas y eso me hizo creer que desde hace muchos años alguien me tomaba el pelo y me trababa como a un idiota con mucho dinero...
Dede hace unos años formaba parte de esta familia o por lo menos así pensaba. Hoy quiero darles las gracias a los novios por hacerme abrir los ojos. Me equivoqué sobre mi papel en esta familia. Pensaba que las dos mujeres más importantes de mi vida, presentes aquí, me amaban y me trataban con respeto, pero en realidad era para ellas un banco con la cuenta abierta. Me quitaron el papel del padre y no podré acompañar a mi hija al altar, pues quiero renunciar el papel del pagador de la boda. Ese también es el deber del verdadero padre.
En el silencio salí de MI casa. El mismo día cancelé la cuenta y dosolví el contrato con la empresa encargada de la boda (por suerte, pagué solo un anticipo). Quizás fue egoísta de mi parte, pero bueno, ya estaba harto de aprovecharse de mí.
Nosotros entendemos su punto de vista, ¿y vosotros?
¡Vale la pena compartir su historia ejemplar!