Tan solo 8 horas después de nacer, esta niña se convirtió en huérfana.
La vida es imprevisible y normalmente no nos damos cuenta de ello... No podemos estar seguros de sobrevivir hasta mañana y nadie lo entiende mejor que lo entendía Megan Moss Johnson.
La chica, que vivía en Missouri, se puso muy enferma cuando era adolescente... Sufrió una miocarditis, necesitaba un trasplante de corazón. Durante muchos años Megan vivía sabiendo que aquél podía ser su último día. Gracias a ello aprendió a mostrar el amor a sus seres queridos y a disfrutar de los detalles. Cuando tenía 23 años, le trasplantaron un nuevo corazón: ¡la operación terminó bien!
Los años después del trasplante fueron los mejores de su vida, Megan se casó con un músico profesional, Nathan Johnson.
Lo único que le molestaba a Megan fueron las visitas de control en el hospital. La mujer tenía que frecuentar el hospital después de quedarse embarazada. Los médicos tenían sus razones para estar preocupados por su corazón... Seguid leyendo.