Un padre con su hijo se pararon delante del espejo. Lo que pasó luego es maravilloso. ¡Qué gracia! Jaja
Supuestamente todos los padres se dan cuenta que sus hijos pueden ser cómo sus pequeñas copias. Y mucho más hablando de la conducta y de costumbres. Este pequeño quiere tanto ser como su padre que imita todos sus movimientos. ¿El efecto? Es cuestión de gusto, pero a nosotros nos encantó.
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