Muriendo por estar disparada varias veces hizo algo que le salvó la vida a su bebé. Esta mujer es una heroína.
Esta mujer tan bella de la foto es Jessica Arrendale. Era una madre joven muy alegre y llena de energía. Tenía una hija de quince años, Naiomi, y una chiquilla Cobie. Por desgracia, el destino no les dejó pasar mucho tiempo juntas. Esta tarde funesta Jessica dio su vida para proteger a su hijita menor. Y duele aún más sabiendo que el culpable por esta tragedia fue el padre de la niña...
Jessica vivía con sus hijas y sus amigos en una casa grande monofamiliar. Este día terrible estaba en casa sola con la bebé. No estaba nadie para ayudar.
Suerte en la desgracia, su hija mayor también estaba fuera. En la foto podéis ver las hermanas juntas.
El padre de la segunda de las hijas de Jessica era Antoine, un veterano. El hombre tenía también dos hijas de su relación anterior. La ex mujer de Antoine dijo en la entrevista que él era un buen padre, pero la guerra dejó en él una huella muy fuerte.