Una madre jóven y muy nerviosa estaba sentada en un avión cuando de repente una extraña se llevó a su bebé... ¡No pudo describir su agradecimiento!
“Hace tiempo que planeaba este viaje a Nick. Tenía miedo ya que iba a volar sola con Rylee. Casi todos los asientos estaban ocupados y los pasajeros estaban silenciosos. Y por supuesto Rylee se puso a llorar...
Mis primeros compañeros de la fila, una pareja, estaban visiblemente molestos. Vi dos asientos libres en otro sitio y pregunté a la azafata si puedo moverme. ¡Por suerte me dijo que sí y ocupó un asiento al lado de una mujer extraordinaria!"
"No se si notó lo nerviosa que estaba pero hizo todo para que aquél día acabara bien. Rylee lloraba da igual que hacía para tranquilizarle. Mi compañera preguntó si ella podía intentar algo. Cogió a la pequeña y ella... ¡de repente dejó de llorar! Miraba por la ventana, jugaba con la mujer desconocida y luego se durmió.
La mujer me ayudó a salir del avión con Rylee y todas cosas. La verdad es que no es fácil viajar sola con una niña en los brazos y llevando maletas."
"Nyfesha Miller, no imaginas cómo me hiciste feliz con tu acto de bondad. Tenía lágrimas en los ojos cuando miraba a vosotras dos dormidas. ¡Gracias a ti este vuelo tan desagradable se convirtió en algo realmente bonito! ¡Gracias! Te deseo todo lo mejor."
Ya todos sabemos bien cómo los niños pequeños saben arruinar un vuelo. Y aunque sabemos que no es su culpa que lloran, nos cuesta ocultar la irritación. Y por eso nos impresionó lo que hizo Nyfesha. Ayudó a una madre jóven, tranquilizó su hija y todos pudieron descansar mientras volaban. ¡Es un ejemplo digno de seguirlo!