Vio a un oso ahogándose, pues... ¡hizo algo increíble!
¡¿Podéis imaginar un rescate de un oso que pesa unos 170 kilógramos?! Lo logró Adam Warwick de Florida. Bueno, pero empecemos por el principio...
El oso fue capturado mientras buscaba comida. Las autoridades fueron informados sobre esta visita inoportuna. El plan era simple: darle con un dardo tranquilizante y luego transportarlo al bosque. Pero no todo fue según el plan...
Después de darle con el dardo, el oso entró en pánico. Huyó.
Se dirigió hacia el agua y fue una idea muy mala...