15 horas. Tanto tiempo les alejaba de ser libres. Los que protestaban intentaron dejarlos así... ¡Lo que pasó luego fue un milagro!
A pesar de las dificultades los voluntarios seguían con su plan.
Para facilitar a los elefantes la entrada a un camión, usaron una retroexcavadora.
Menos mal que los elefantes mantenían la paciencia. Fue cómo si supieran que la gente quería ayudarles. Después de unas horas de trabajo y nervios, los animales llegaron a su mejor vida...