Los que le rescataron le cortaron el pelo y fue entonces cuando descubrieron algo terrible. Entran ganas de llorar viendo estas fotos, pero por suerte esta historia acaba bien.
Bobb se siente en su nueva casa tan bien que ya inclusa muestra sus humores...
Ahora, a pesar de perder dos extremidades, se siente amado, seguro y feliz.
¡Compártelo! Los animales se lo merecen.